Me gustó mucho esta película, tiene esa potencia y esa estética propias del cine de los '70. Me gustaron muchísimo la paleta de colores, la fotografía, las escenas en exteriores y también las que transcurren en la casa de Axel; hay algo en la textura de las imágenes, una materialidad que las películas de la era digital no tienen. Las escenas que siguen a la apertura de la película, cuando Axel apuesta USD 20 a los chicos que juegan al básquet en la calle y con su madre al tenis, me parecieron muy hermosas y creo que son buenos ejemplos de esto que comentaba recién sobre la calidad de la imagen. Lo mismo los recorridos en auto.
La escena del cumpleaños del abuelo, esa casa con esos jardines y esos interiores barrocos que veremos más adelante, tan europeo todo, cuesta pensar que estamos en Estados Unidos... Me recordó un poco a la fiesta de El Padrino, una manera de mostrar los orígenes de la familia y el vínculo entre ellos.
A diferencia de lo que pasaba en The Hustler, en principio acá sí tenemos un adicto al juego: Axel apuesta a todo, todo el tiempo. Y uno podría decir que cuando sus jugadas y sus pérdidas van escalando, termina apostando su propia vida. Pero lo que me parece muy interesante es que a la película no le interesa mostrar la caída de Axel, la pérdida o la degradación de sus relaciones familiares y amorosas, sino su implicación ética en ese descenso. Aunque por momentos lo parezca, Axel no es un juguete de las circunstancias, ni un tipo que va cayendo y no sabe cómo salir y cada vez se entierra más, no es un adicto que pierde su voluntad. Axel todo el tiempo está buscando demostrar que 2 + 2 puede ser 5 si él se lo propone, que se trata de su voluntad y de su deseo, que estar vivo evidentemente es estar en riesgo, estar al límite, vivir en la incertidumbre. "Will and balls", como dice refiriéndose a su abuelo, el único personaje de la película que realmente parece contar para Axel y del cual espera un gesto que no llega, muy posiblemente no porque el abuelo no lo quiera lo suficiente, sino porque Axel no entendió o no quiere ser lo que se espera que sea (es muy interesante ver su cara cuando visita al abuelo con Billie y éste le dice que no es mujer para un intelectual, para un hombre de cáracter y virtud.
Cuando en el final va al barrio negro y arma toda la escena para que el proxeneta le pegue (¿se acuerdan de este actor? era el informante de Starsky y Hutch), me acordé de Jeff Costello en El samurai. Pensé que iba a hacerse matar porque no toleraba la vergüenza de haber traicionado a su alumno. Pero en verdad, su mirada sonriente cuando ve su cara cortada en el espejo, parece decir que encontró otra forma de sentirse vivo, un nuevo riesgo. En ese momento, las palabras que le dice Sorvino referidas a Spencer ("Once you ain't a virgin no more, you're a whore till you die") parecieran encontrar otro destinatario. Y es muy bueno el final con esa escena congelada, final nada moralizante ni redentor, donde lo único imaginable es que Axel irá por más.
Antes mencionaba la diferencia con The Hustler, pero creo que también hay coincidencia en estas películas en cuanto a lo que hay de búsqueda personal en estos personajes.
Un recurso no original pero que funciona (y del que por suerte Reisz no abusa) es el de mostrar a Axel en sus clases, desplegando su propia teoría sobre la vida, la que fuera del salón de clases pondrá en práctica. De nuevo me parece muy interesante que el director no ponga el acento en la denigración del profesor culto, lector y amante de Malher, "on the contrary" (para citar un diálogo entre Hips y Axel) lo que vemos es un ejercicio de su voluntad.
Marian, como siempre muy hermoso e interesante tu comentario, un lujo. El final me resultó totalmente inesperado, me impactó y me dejó pensando mucho y se me ocurrieron dos lecturas. Una la que vos hacés: Axel encontró otro tipo de apuesta. Pero también me pregunté si no está relacionado con el episodio que narra Billie, sobre su viaje anterior a Las Vegas con otro hombre que también termina con la cara lastimada. Veo ahí un recorrido similar en ambos y pienso que, tal vez, en esa herida Axel se reconoce incluido en algún tipo de hermandad. Será una explicación muy rebuscada?
No Malala, no me parece rebuscada la asociación que hiciste, para nada. Por algún motivo está incluida esa "anécdota" que cuenta Billie. Fijate que Billie es un personaje que sirve más para delinear a Axel que para mostrar una relación de pareja.
Me gustó mucho esta película, tiene esa potencia y esa estética propias del cine de los '70. Me gustaron muchísimo la paleta de colores, la fotografía, las escenas en exteriores y también las que transcurren en la casa de Axel; hay algo en la textura de las imágenes, una materialidad que las películas de la era digital no tienen.
ReplyDeleteLas escenas que siguen a la apertura de la película, cuando Axel apuesta USD 20 a los chicos que juegan al básquet en la calle y con su madre al tenis, me parecieron muy hermosas y creo que son buenos ejemplos de esto que comentaba recién sobre la calidad de la imagen. Lo mismo los recorridos en auto.
La escena del cumpleaños del abuelo, esa casa con esos jardines y esos interiores barrocos que veremos más adelante, tan europeo todo, cuesta pensar que estamos en Estados Unidos... Me recordó un poco a la fiesta de El Padrino, una manera de mostrar los orígenes de la familia y el vínculo entre ellos.
A diferencia de lo que pasaba en The Hustler, en principio acá sí tenemos un adicto al juego: Axel apuesta a todo, todo el tiempo. Y uno podría decir que cuando sus jugadas y sus pérdidas van escalando, termina apostando su propia vida. Pero lo que me parece muy interesante es que a la película no le interesa mostrar la caída de Axel, la pérdida o la degradación de sus relaciones familiares y amorosas, sino su implicación ética en ese descenso. Aunque por momentos lo parezca, Axel no es un juguete de las circunstancias, ni un tipo que va cayendo y no sabe cómo salir y cada vez se entierra más, no es un adicto que pierde su voluntad. Axel todo el tiempo está buscando demostrar que 2 + 2 puede ser 5 si él se lo propone, que se trata de su voluntad y de su deseo, que estar vivo evidentemente es estar en riesgo, estar al límite, vivir en la incertidumbre. "Will and balls", como dice refiriéndose a su abuelo, el único personaje de la película que realmente parece contar para Axel y del cual espera un gesto que no llega, muy posiblemente no porque el abuelo no lo quiera lo suficiente, sino porque Axel no entendió o no quiere ser lo que se espera que sea (es muy interesante ver su cara cuando visita al abuelo con Billie y éste le dice que no es mujer para un intelectual, para un hombre de cáracter y virtud.
Cuando en el final va al barrio negro y arma toda la escena para que el proxeneta le pegue (¿se acuerdan de este actor? era el informante de Starsky y Hutch), me acordé de Jeff Costello en El samurai. Pensé que iba a hacerse matar porque no toleraba la vergüenza de haber traicionado a su alumno. Pero en verdad, su mirada sonriente cuando ve su cara cortada en el espejo, parece decir que encontró otra forma de sentirse vivo, un nuevo riesgo. En ese momento, las palabras que le dice Sorvino referidas a Spencer ("Once you ain't a virgin no more, you're a whore till you die") parecieran encontrar otro destinatario. Y es muy bueno el final con esa escena congelada, final nada moralizante ni redentor, donde lo único imaginable es que Axel irá por más.
Antes mencionaba la diferencia con The Hustler, pero creo que también hay coincidencia en estas películas en cuanto a lo que hay de búsqueda personal en estos personajes.
Un recurso no original pero que funciona (y del que por suerte Reisz no abusa) es el de mostrar a Axel en sus clases, desplegando su propia teoría sobre la vida, la que fuera del salón de clases pondrá en práctica. De nuevo me parece muy interesante que el director no ponga el acento en la denigración del profesor culto, lector y amante de Malher, "on the contrary" (para citar un diálogo entre Hips y Axel) lo que vemos es un ejercicio de su voluntad.
Qué conjunto de actores.
Marian, como siempre muy hermoso e interesante tu comentario, un lujo.
ReplyDeleteEl final me resultó totalmente inesperado, me impactó y me dejó pensando mucho y se me ocurrieron dos lecturas. Una la que vos hacés: Axel encontró otro tipo de apuesta. Pero también me pregunté si no está relacionado con el episodio que narra Billie, sobre su viaje anterior a Las Vegas con otro hombre que también termina con la cara lastimada. Veo ahí un recorrido similar en ambos y pienso que, tal vez, en esa herida Axel se reconoce incluido en algún tipo de hermandad. Será una explicación muy rebuscada?
No Malala, no me parece rebuscada la asociación que hiciste, para nada. Por algún motivo está incluida esa "anécdota" que cuenta Billie. Fijate que Billie es un personaje que sirve más para delinear a Axel que para mostrar una relación de pareja.
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