Recién termino de ver On the rocks, una película chiquita pero agradable, especialmente disfruté de ver a Bill Murray.
Una historia de padre-hija en la cual ante la sospecha de una infidelidad por parte de su marido, la hija acude al padre, un experto en el tema. ¿De verdad cree Laura que su padre quien podrá aconsejarla? ¿O se trata de saldar viejas cuentas? Felix, quien se casó muy enamorado de su mujer (como Laura y Dean), inicia un romance con una colega más joven porque su mujer no tiene ojos más que para sus hijas... Es la misma situación que atraviesa Laura. El problema no parece ser el marido, sino Laura, quien no puede silbar desde que se convirtió en madre y está bloqueada en su quehacer de escritora. Luego de saldar cuentas con Felix, recupera la capacidad de silbar y de escribir. Ah, y también a su marido.
Para mi esta película resultó una gran desilusión, esperaba mucho más porque todas las otras películas de Sofía Coppola me habían gustado mucho. La vi como una Toni Erdmann de Hollywood, con un padre más ganador, con más plata, donde todo brilla más, etc. Y si Toni Erdmann no me había encantado, ésta directamente me pareció bastante mala. El conflicto me pareció ridículo, más de una comedia de Doris Day (que en palículas de esa época me encantaría) que de una contemporánea. Y Laura me causa muy poca simpatía, como casi siempre me pasa con las mujeres que reclaman "atención" de sus maridos: otra actitud bastante fuera de época a mi entender. Hay dos escenas que me dan un poco de verguenza ajena, las dos muy declamativas y un poco extemporáneas. Una: la hija que estuvo toda la película diciendo "qué loco mi papá" y mirándolo simpáticamente tiene de golpe una explosión de reproches hacia el pasado relejano en que él las abandonó: no habíamos visto nada de ese rencor antes. Y la otra la del esposo hablando de su esfuerzo para estar a la altura de su esposa: quién habla así en el siglo XXI? Leo el comentario de Marian y me doy cuenta de que estoy demasiado enojada para lo que realmente pasa en la película. Es verdad que es simpática y finalemente bastante inocente. Supongo que debo atribuir mi reacción a la expectativa, esa enemiga del juicio justo.
Leí por ahí que era una de las mejores películas de Coppola, que mostraba su madurez como directora... claramente es demasiado decir.
Toni Erdmann me parece una película mucho más compleja, no tanto por las idas y vueltas en la relación padre-hija, sino por lo que dice de la sociedad europea, de los países centrales de la Unión Europea como Alemania y los periféricos como Rumania. La peli de Coppola no tiene nada de todo eso y es -como dice Malala- hasta un poco extemporánea. Es como una película de cable de los 90.
Recién termino de ver On the rocks, una película chiquita pero agradable, especialmente disfruté de ver a Bill Murray.
ReplyDeleteUna historia de padre-hija en la cual ante la sospecha de una infidelidad por parte de su marido, la hija acude al padre, un experto en el tema. ¿De verdad cree Laura que su padre quien podrá aconsejarla? ¿O se trata de saldar viejas cuentas? Felix, quien se casó muy enamorado de su mujer (como Laura y Dean), inicia un romance con una colega más joven porque su mujer no tiene ojos más que para sus hijas... Es la misma situación que atraviesa Laura. El problema no parece ser el marido, sino Laura, quien no puede silbar desde que se convirtió en madre y está bloqueada en su quehacer de escritora. Luego de saldar cuentas con Felix, recupera la capacidad de silbar y de escribir. Ah, y también a su marido.
Para mi esta película resultó una gran desilusión, esperaba mucho más porque todas las otras películas de Sofía Coppola me habían gustado mucho.
ReplyDeleteLa vi como una Toni Erdmann de Hollywood, con un padre más ganador, con más plata, donde todo brilla más, etc. Y si Toni Erdmann no me había encantado, ésta directamente me pareció bastante mala.
El conflicto me pareció ridículo, más de una comedia de Doris Day (que en palículas de esa época me encantaría) que de una contemporánea. Y Laura me causa muy poca simpatía, como casi siempre me pasa con las mujeres que reclaman "atención" de sus maridos: otra actitud bastante fuera de época a mi entender.
Hay dos escenas que me dan un poco de verguenza ajena, las dos muy declamativas y un poco extemporáneas. Una: la hija que estuvo toda la película diciendo "qué loco mi papá" y mirándolo simpáticamente tiene de golpe una explosión de reproches hacia el pasado relejano en que él las abandonó: no habíamos visto nada de ese rencor antes. Y la otra la del esposo hablando de su esfuerzo para estar a la altura de su esposa: quién habla así en el siglo XXI?
Leo el comentario de Marian y me doy cuenta de que estoy demasiado enojada para lo que realmente pasa en la película. Es verdad que es simpática y finalemente bastante inocente. Supongo que debo atribuir mi reacción a la expectativa, esa enemiga del juicio justo.
Leí por ahí que era una de las mejores películas de Coppola, que mostraba su madurez como directora... claramente es demasiado decir.
DeleteToni Erdmann me parece una película mucho más compleja, no tanto por las idas y vueltas en la relación padre-hija, sino por lo que dice de la sociedad europea, de los países centrales de la Unión Europea como Alemania y los periféricos como Rumania. La peli de Coppola no tiene nada de todo eso y es -como dice Malala- hasta un poco extemporánea. Es como una película de cable de los 90.
Otra peli sin sentido para mí.
ReplyDeleteNo me dejó mucho ni para decir.
Todo me resultó irrelevante.